Un mes después ya están con tamaño de un palmo, y con estos días de calorcete que estamos teniendo crecen a buen ritmo. Ya vendrán los días del duro invierno en que la planta sufrirá más.
Habas creciendo
Al mismo tiempo que las habas hemos plantado los guisantes y, como podeís ver, ya empiezan a echar los primeros zarcillos con los que treparan por el tutor.
Guisantes
Ahora solo queda cuidarlos hasta que recojamos el fruto allá por el mes de marzo (larga espera). Entre las labores que tenemos que hacer está el sallar, resallar, aporcar y entutorar. En sucesivas entradas daremos buena cuenta de ellas.
Habas y guisantes con la tierra sallada (cavada para eliminar las malas hierbas)
Están preciosas las habas! y las fotos me encantan, que prolijidad!
ResponderEliminarbesote!
Carola